Podcast 196: Viajes al pasado

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Según la física,  los viajes en el tiempo son posibles, al menos hacia el futuro. Sin embargo, cuando de regresar al pasado se trata, encontramos paradojas que pueden poner “el tiempo de cabeza”. Sergio de Régules, físico y divulgador, cuenta este extraño relato, que ilustra la complejidad de los viajes en el tiempo.

Una recién nacida es abandonada en un orfanatorio en 1945. En 1963 conoce a un vagabundo y se enamora de él, queda embarazada. El vagabundo la abandona, durante un parto difícil los médicos descubren que Jane es hermafrodita, o sea que tiene ambos sexos, y se ven obligados a convertirla en hombre para salvarle la vida.

Hasta ahí vamos bien. Una huérfana, crece, tiene un bebé y cambia de sexo. Sigamos.

Alguien rapta a su bebé y Jane, a quien en adelante llamaré John, se da a la bebida y se convierte en vagabundo, conoce en un bar a un amable anciano al cual le cuenta la tragedia de su vida. El anciano le ofrece la posibilidad de viajar al pasado y vengarse del vagabundo que la abandonó. Jane ahora John, regresa a 1963 y se enamora de una joven huérfana, a quien luego deja embarazada. El anciano viaja nueve meses al futuro, rapta al bebé y lo deposita en un orfanatorio en 1945, luego traslada a John a 1985 y al paso de los años éste se reforma y se dedica viajar en el tiempo, ya anciano John conoce a un vagabundo en un bar de 1970.

¿Te perdiste entre los personajes? Resulta que Jane, John, la bebé y el anciano son la misma persona. Es decir que si existieran los viajes al pasado, una persona podría llegar a ser su madre o padre, peor aún, podría interferir eliminando personas al evitar que nazcan.

Otras paradojas en el tiempo, se relacionan con la producción y el conocimiento. Por ejemplo, si viajaras al pasado a conocer a Frida Kahlo y le mostraras un libro con sus obras antes de que ella las pinte, Frida podría copiar las pinturas de tu libro… pero, ¿de dónde saldrían las obras originalmente?  Es decir, ¿a quién se le habrían ocurrido si Frida las hubiera copiado de sí misma?

Éstas y otras ideas extrañas muestran que viajar al pasado es algo más complejo que viajar al futuro. No se trata de que el tiempo dé un salto hacia atrás, ya que en ese caso sería como un disco rayado, y repetiríamos las mismas acciones sin ser conscientes de estar en el pasado.

Algunos piensan que los agujeros de gusano, también llamados puentes de Einstein-Rosen son la puerta al pasado. Estos funcionarían conectando dos regiones del espacio-tiempo, como al doblar una hoja para unir sus extremos.

Pero en todo caso no vemos donde estén los visitantes del futuro hoy, aunque hay varias respuestas, podría ser que estén en todas partes y que en este momento estén escuchando este programa. Otra es que a lo mejor cuando se invente la máquina del tiempo que permite viajar al pasado sea demasiado caro y nadie la use. Pero hay una posibilidad que se explora que es terrible, que es: no hay viajeros del futuro porque el futuro está desierto.

Habrá que esperar, o mejor, integrarse a la investigación que mueve la frontera del conocimiento. ¿Te animás?

Guión: Stefany Díaz Valerio
Edición y  publicación: Alejandra León Castellá, CIENTEC
Locución: Mariana Rivera Ramírez
Técnico de Edición: Leonardo León Saavedra
Entrevistado: Sergio de Régules. Físico y divulgador en la Dirección General de Divulgación de la Ciencia, UNAM.