El Proyecto 30 voces por los 30 años de CIENTEC es una iniciativa de CIENTEC para dar a conocer las experiencias de personas vinculadas a esta organización, en el marco de su Trigésimo Aniversario. A lo largo de este 2018, recopilaremos y publicaremos artículos de opinión elaborados por personas con una particular contribución en el crecimiento de esta organización, que durante estas tres décadas se ha enfocado en la educación y divulgación científica desde muy diversos frentes.
Agradecemos a todas las personas que han aceptado contribuir con esta iniciativa, no solo por hacer un valioso aporte de documentación de experiencias y testimonios, sino también por su apoyo desinteresado y comprometido en todo este tiempo. Esperamos que sus testimonios sean inspiración para muchas personas más, y que CIENTEC siga contando con este incríble grupo de colaboradores, amigos y amigas, y que siga creciendo durante muchos años más.
Lo primero que me llamó la atención al llegar a Costa Rica fue el acento del chofer de taxi que me llevó del aeropuerto al hotel. Nunca había oído esa erre arrastrada, suavizada, que caracteriza a los ticos.
Luego, en el trayecto al hotel, me sorprendió ver que existe un Hospital México en ese país, y enterarme con orgullo de que fue construido en parte con apoyo del gobierno mexicano. Más adelante, me asombró la extremada amabilidad de los costarricenses: incluso a los mexicanos, que somos bastante corteses y obsequiosos, nos agobia un poco el trato respetuoso en extremo, melifluo y atento hasta el límite (inmediatamente me convertí en “don” Martín). Tardé un poco en acostumbrarme –francamente no estoy acostumbrado a que me abran la puerta, como a una dama–, pero me encantó.... Leer artículo completo
Pocas empresas humanas sobreviven exitosamente durante tres décadas y, además, hacen aportes importantes en la comunicación de la ciencia a la comunidad costarricense, como lo ha logrado CIENTEC. La Fundación ha impactado a un gran número de personas, permitiendo que las personas se acerquen a la naturaleza a través de giras, seminarios, congresos y talleres, para ser testigos de las excelsas maravillas a nuestro alrededor, tanto en lo grande del universo, como en lo pequeño.
Recuerdo que mi primera impresión de CIENTEC está asociada con la astronomía, y a las giras de observación de fenómenos como eclipses y lluvias de estrellas, inspirados por el entusiasmo de su directora Alejandra León Castellá y del astrónomo José Alberto Villalobos, de la Universidad de Costa Rica. Así... Leer artículo completo
Era mayo de 1994. Iba a darse un cambio de Gobierno en mi país, Costa Rica, y con ello sobrevino en mi vida una de las etapas de más desafíos, pues debía de dejar una institución en la que había pasado veinte años. Durante las dos décadas que trabajé en el Ministerio de Planificación Nacional y Política Económica me había convertido en profesional y había aprendido mucho. No estaba segura de que todo eso que había aprendido lo pudiera aplicar en un nuevo trabajo, pero no sabía que, más bien, debía prepararme para un nuevo aprendizaje: mi vida me estaba dando la oportunidad de un nuevo reto, y era el momento de desarrollar nuevas habilidades y destrezas. Pasé de ser una burócrata de escritorio que elaboraba informes sobre la situación de la macroeconomía agropecuaria del país, a... Leer artículo completo
Supe por CIENTEC que había un conejo en la Luna, presencié gracias a la fundación mi primera lluvia de meteoros, un eclipse anular de sol y en Palo Verde me dejé maravillar por la noche profunda que ofrecía constelaciones, planetas, cúmulos, nebulosas...Se dice fácil, pero pasaron años entre unas experiencias y otras. Eso sí, todas dan cuenta de una relación larga y de aprendizaje, piedras angulares de CIENTEC durante estas tres décadas que lleva acercándonos al saber.
Lo hace con una facilidad admirable y asombrosa, como si fuera sencillo, y a menudo con lo que provee la cotidianidad: botellas para hablar del sol cenital , un cartón huequeado para ver eclipses sin riesgo, un molinito de papel sobre una taza de agua caliente para entender las corrientes termales.